El mundo laboral está experimentando una transformación profunda y acelerada, impulsada por la tecnología, la globalización y los cambios demográficos. Estas transformaciones están dando lugar a nuevas formas de trabajar, nuevas habilidades demandadas y nuevos desafíos para las organizaciones y los trabajadores.
Así se desprende del Work Relationship Index de HP, un informe que analiza cómo son las relaciones de los empleados con el trabajo a nivel global y cuya principal conclusión es que sólo un 27 % de los trabajadores afirma que ésta es sana. Ante esta realidad, la inteligencia artificial se alza como clave a la hora de lograr que las relaciones laborales mejoren.
En este sentido, Dave Shull, presidente de HP Workforce Solutions en HP, remarca que “la inteligencia artificial representa una oportunidad significativa para transformar la dinámica de trabajo y desbloquear un entorno más productivo para todos”. Eso sí, para que los empleados puedan aprovechar realmente los beneficios de la IA, “los directivos deben tomar la iniciativa de educar a su plantilla y encabezar una integración efectiva”.
A tenor de los resultados del estudio se puede decir que existe una tensión notable en la relación de las personas y su trabajo. A esto se une el hecho de que las expectativas de los empleados aumentan (un 58 % afirma que éstas han crecido en los últimos tres años). Combinar estos dos factores no es tarea fácil para unas organizaciones que cada vez están más preocupadas por la captación y retención del talento.
Potencial de la IA
El estudio de HP revela un amplio consenso entre distintos actores empresariales sobre el potencial de la inteligencia artificial para optimizar las condiciones laborales. Tanto empleados como directivos y responsables de la toma de decisiones de TI coinciden en que la IA puede contribuir significativamente a mejorar el equilibrio entre la vida laboral y personal, así como a agilizar procesos y tareas.
A pesar de esto, los directivos tienen un papel crucial en la adopción exitosa de la IA. Deben comunicar claramente los beneficios de esta tecnología y proporcionar la capacitación necesaria para que los empleados puedan integrarla en sus tareas diarias. Esto no solo mejorará la productividad, sino que también fortalecerá la relación de los trabajadores con su empleo.
Y es que, el estudio muestra que la incertidumbre continúa sobre la mejor manera de utilizar la IA y sacarle el máximo partido: un 42 % de las personas se siente inseguro sobre cuándo utilizar la inteligencia artificial en su puesto de trabajo y un 41 % cree que está mal preparado para aprovechar todo el potencial de esta tecnología.
“En un panorama laboral en evolución en el que las empresas se esfuerzan por aumentar el compromiso, la retención y la productividad, así como por mantener a sus empleados inspirados, la integración estratégica de la IA emerge como una potente fuerza de transformación”, asegura Stella Low, directora de comunicaciones de HP. “Los trabajadores del conocimiento de todo el mundo esperan que los altos directivos les muestren cómo navegar por el terreno de la IA con eficacia: el escenario está preparado para que los directivos aprovechen la oportunidad tanto para empoderar a sus empleados como para impulsar el éxito”.
Más allá de la IA
Más allá de la inteligencia artificial es necesario tomar otras medidas que incrementen la motivación de los empleados. La confianza, la conexión emocional y la autonomía constituyen los pilares fundamentales de una relación laboral saludable. Estos factores son determinantes para fomentar la satisfacción, el compromiso organizacional y, en última instancia, el éxito empresarial.
Las empresas pueden tomar medidas para mejorar la relación entre sus empleados y su trabajo ofreciendo oportunidades de crecimiento y desarrollo, fomentando un entorno de trabajo positivo y comunicándose eficazmente con los empleados.
Para ello, deben aplicar políticas que den prioridad a la confianza y a la conexión emocional; invertir en la capacitación de los empleados de tal manera que tengan mayor autonomía y poder de decisión; y ofrecer oportunidades de crecimiento para ayudarles a alcanzar todo su potencial. La comunicación es otra vía esencial para lograr una mayor satisfacción laboral. Ésta debe ser abierta y transparente.
Pero no todo es tarea de la empresa. Los empleados deben establecer expectativas realistas, fomentar las relaciones con los compañeros, comunicar sus necesidades a sus jefes y buscar oportunidades de crecimiento si lo que desean es tener una relación sana con su trabajo.